
· · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · ·
June 17, 2013
Say my name

June 8, 2013
Re-flexiones
Fue en ese momento cuando me lo planteé de una forma mucho más racional y sensata de lo que nunca hubiera imaginado. El hombre sin escrúpulos pudiera ser que los tuviera y, entonces, los papeles se intercambiaban y los roles establecidos se tiraban por la borda.
La labia desenfrenada encontraba su freno en los sentimientos que nunca había querido mostrar y los viajes en tren se arrepentían de haber viajado tanto para una recompensa tan pobre pues, a veces, el camino más largo es el trayecto de una lágrima. ¿Qué sucedería a partir de entonces? ¿Todo sería diferente o tendría más motivos para no oír sus pensamientos?
La posibilidad de hacerle daño era ensordecedora, casi inaudita.
[...] era muy tarde para seguir escribiendo, pero un cambio de planes le sirvió para recapacitar.
Subscribe to:
Posts (Atom)